Gorovói señaló que desde la entrada en vigor del permiso de estancia sin visado en Bielorrusia de cinco días a ciudadanos de 80 países, el tráfico de drogas a Rusia proveniente del país vecino aumentó significativamente, las sustancias prohibidas entran en territorio ruso tanto por tren como por carretera.
En febrero de este año Bielorrusia dejó de exigir el visado a los nacionales de 80 países que entran a través del aeropuerto de Minsk por un plazo de cinco días como máximo.
Como medida de respuesta, el director del Servicio Federal ruso de Seguridad (FSB), Alexandr Bórtnikov, ordenó establecer zonas fronterizas de control en las regiones rusas de Smolensk, Pskov y Briansk, limítrofes con Bielorrusia, para crear las condiciones necesarias para la protección de la frontera nacional.
Este hecho fue calificado por el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, como una violación de los acuerdos bilaterales.
Sputnik
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